Los propietarios que ponen sus pisos en venta sobrevaloran sus precios alrededor del 20% respecto al valor de mercado de los inmuebles similares de su zona, según un estudio realizado por Tecnocasa. La sobrevaloración más alta se da en Málaga y Zaragoza, donde los propietarios piden de media un sobreprecio del 24%, seguidas por Valencia (22%), Sevilla (20%), Barcelona (19%), Madrid, (18%), entre las ciudades donde opera el grupo. El recuerdo de los precios más altos que se alcanzaron en el 2007 y el asumir expectativas de subidas de precios cercanos al 20% como había esos años e incorporarlas a los precios explican en buena parte el fenómeno.
En DISTRITO 10, presentamos al propietario un estudio del valor de mercado de su vivienda, y algunos propietarios son receptivos, mientras que otros, que quizás ya han hecho cálculos de que necesitan una determinada cantidad como entrada para comprar otro inmueble, no rebajan su precio. Ésta práctica ya se daba en los años previos a la crisis, pero entonces los precios crecían a tasas del 20% anual, con lo que la valoración excesiva de los propietarios podía quedar absorbida por la propia dinámica del mercado en un plazo razonable. Ahora los aumentos de precios son muy inferiores (del 11,15% en el 2017), y en DISTRITO 10, preferimos hacerle una valoración real del mismo de forma gratuita y aconsejar al propietario cual sería el precio aconsejable para la venta de su vivienda.
En DISTRITO 10, comprobamos que al cabo de unos meses los propietarios se dan cuenta de esta sobrevaloración de su inmueble y al no haberlo vendido en el precio que querían, al final rebajan el precio.
EL PROBLEMA DE LA SOBREVALORACIÓN EN LOS PISOS EN VENTA
En DISTRITO 10 creemos que la sobrevaloración es un freno enorme para los compradores potenciales. Los compradores ahora deben analizar bien el mercado antes de comprar.
El estudio de Tecnocasa destaca que es usual que los compradores traten de negociar el precio a la baja, pero de media la rebaja del precio que aceptan es del 5,1%: un nivel ya muy cercano al que existía en los años del boom (entre el 2004 y el 2006 rondó el 4%), y muy lejos de las rebajas del 14,2% que aceptaban los propietarios en el 2012 para vender sus pisos.
CAMBIA LA FINANCIACIÓN PARA LA COMPRA DE LA VIVIENDA
Uno de los motores del mercado inmobiliario en el 2017 siguieron siendo los inversores: según los datos de Tecnocasa realizaron el 28,8% de las compras, cuatro puntos más que en el 2013. La baja rentabilidad de los depósitos bancarios sigue atrayendo inversores, que compiten con las familias que buscan piso. Según los datos de la firma, el 72% de los inversores compra al contado, mientras que un 27% también pide hipoteca. La mayor actividad del mercado, sin embargo, viene de quienes buscan una vivienda para uso propio.
El aumento de los precios ha cambiado la financiación de las compras: si en el 2013 el 52% de los inmuebles que se vendían se pagaban al contado, hoy son sólo el 30%, porque el 70% de los compradores, incluyendo a inversores, ha de recurrir a una hipoteca.
¿CON BURBUJA O SIN BURBUJA?
“En estos momentos no hay burbuja en el mercado de compra de vivienda”, señala Tecnocasa, que advierte, sin embargo, que la situación del mercado de alquiler está llegando al límite. La rentabilidad que ofrece una vivienda que se ponga en alquiler es ahora del 7%. Rentabilidades muy alejadas de las del 2007, cuando eran de apenas el 2%.
En el mercado del alquiler, sin embargo, “el límite es la capacidad de pago de las familias, sin endeudamiento, y con los salarios actuales una pareja media no puede pagar más de 1.000 euros mensuales por el alquiler”. La firma señala que el perfil típico de quien firma un contrato de alquiler es una persona soltera, con contrato indefinido, de entre 25 y 44 años y, en un 70%, de nacionalidad española.
En estos momentos tampoco se puede hablar de burbuja del alquiler, “porque las subidas de precios reflejan una gran demanda y una falta de inmueble disponibles, y su número tampoco va a aumentar”. Con todo, “estamos cerca de ver el pico de los precios, si no este año, el próximo”. De hecho, señala la firma, en Madrid, y especialmente en Barcelona, ha bajado la tasa de aumento anual de los alquileres, hasta alrededor del 5%, frente a la media estatal, donde el aumento supera el 12%.